Guía práctica del balón intragástrico: funcionamiento y costos
El balón intragástrico es una opción temporal y mínimamente invasiva para apoyar la pérdida de peso cuando la dieta y el ejercicio no han sido suficientes. Funciona ocupando espacio en el estómago para aumentar la saciedad, pero requiere cambios de hábitos y seguimiento médico para sostener resultados y minimizar riesgos.
El balón intragástrico se ha consolidado como una herramienta temporal para apoyar la pérdida de peso en personas con exceso ponderal que buscan alternativas menos invasivas que la cirugía bariátrica. No sustituye los cambios de estilo de vida, pero puede facilitar el control del apetito y mejorar la adherencia a un plan nutricional y de actividad física supervisado. Aunque es un procedimiento relativamente breve, su éxito depende en gran medida del acompañamiento multidisciplinario y del compromiso personal con hábitos saludables.
Este artículo tiene fines informativos y no constituye consejo médico. Consulte a un profesional de la salud calificado para recibir orientación y tratamiento personalizados.
¿Qué es un balón gástrico?
El balón gástrico, también llamado balón intragástrico, es un dispositivo blando de silicona o polímero que se introduce en el estómago para ocupar volumen y promover sensación de saciedad. Existen dos grandes grupos: los que requieren endoscopia para su colocación y retirada, y los ingeribles o “tragables”, que se colocan mediante una cápsula con guía radiológica y se eliminan de forma programada. La permanencia típica es de 4 a 12 meses según el tipo, siempre dentro de un programa de nutrición, conducta alimentaria y seguimiento médico.
¿Cómo funciona realmente el balón gástrico?
Su efecto se basa en tres mecanismos principales: a) ocupa espacio gástrico, de modo que pequeñas porciones producen plenitud; b) enlentece parcialmente el vaciamiento gástrico, prolongando la saciedad; y c) favorece la reeducación alimentaria al facilitar raciones más pequeñas y ritmos de ingesta más pausados. Los modelos endoscópicos se rellenan con solución salina al colocarse bajo sedación; los tragables se inflan tras verificar su posición en el estómago. Finalizado el periodo indicado por el equipo médico, se retira el dispositivo (o se expele en el caso de los tragables) y se continúa el plan de cuidado para preservar los resultados.
¿Qué resultados puede esperar de un balón gástrico?
Los resultados varían según el punto de partida, la adherencia al plan y el tipo de balón. De forma orientativa, muchos pacientes alcanzan pérdidas del 10–15% del peso corporal a los 6 meses, con reportes mayores o menores en función de la evolución clínica. Una proporción significativa recupera parte del peso si no mantiene los cambios en la dieta, la actividad física y el apoyo conductual. Efectos adversos frecuentes en las primeras semanas incluyen náuseas, vómitos, reflujo y cólicos, que suelen ser transitorios; complicaciones serias son poco comunes pero posibles, por lo que el seguimiento especializado es imprescindible.
Antes de decidir, se evalúan criterios de idoneidad como índice de masa corporal, comorbilidades (por ejemplo, hígado graso, apnea del sueño, prediabetes), antecedentes de cirugías digestivas, uso de fármacos, reflujo severo y hábitos. El éxito a largo plazo depende de consolidar rutinas de alimentación consciente, control de porciones, sueño adecuado y movimiento regular, además del acompañamiento con nutrición y psicología.
¿Cuáles son los costos y las opciones del proveedor?
Los costos varían ampliamente según país, tipo de balón, honorarios médicos, hospital o clínica, y lo que incluye el paquete (endoscopia, sedación, controles, nutrición y psicología). Como referencias orientativas: en Estados Unidos suelen situarse entre 6,000 y 9,000 USD; en España entre 3,500 y 6,000 EUR; en Reino Unido entre 3,000 y 5,000 GBP; en México entre 2,500 y 4,000 USD equivalentes. Entre los dispositivos más difundidos están los endoscópicos (p. ej., Orbera, Spatz3) y los tragables (Allurion). A continuación, una comparación general de productos y rangos estimados:
| Product/Service | Provider | Cost Estimation |
|---|---|---|
| Orbera intragastric balloon (6 meses) | Boston Scientific (fabricante); ofrecido por hospitales y clínicas bariátricas | Aproximadamente 3,500–6,000 EUR en Europa; 6,000–9,000 USD en EE. UU. |
| Allurion swallowable balloon (4–6 meses) | Allurion Technologies; ofrecido por clínicas con guía radiológica | Aproximadamente 3,000–5,000 EUR en Europa; 3,500–5,500 USD en varios mercados |
| Spatz3 adjustable balloon (hasta 12 meses) | Spatz Medical; ofrecido por centros con endoscopia terapéutica | Aproximadamente 4,000–7,000 EUR en Europa; 5,000–8,000 USD en varios mercados |
Precios, tarifas o estimaciones de costos mencionados en este artículo se basan en la información más reciente disponible, pero pueden cambiar con el tiempo. Se aconseja realizar una investigación independiente antes de tomar decisiones financieras.
Además del dispositivo, revise qué incluye el paquete: número de consultas nutricionales y psicológicas, pruebas preoperatorias, medicación antiemética, retiro del balón, reprogramación en caso de intolerancia y disponibilidad de soporte telefónico. Para comparar opciones en su área, verifique certificaciones del equipo, experiencia del endoscopista, protocolos de manejo de complicaciones y acceso a atención de urgencia si fuera necesario.
Conclusión El balón intragástrico puede ser un apoyo útil y temporal dentro de un enfoque integral para la pérdida de peso. Su utilidad depende del ajuste entre el tipo de dispositivo y el perfil clínico, de la calidad del programa de acompañamiento y de la constancia en los nuevos hábitos. Una evaluación cuidadosa, expectativas realistas y seguimiento profesional estructurado son claves para obtener beneficios sostenibles y reducir riesgos.
